Capitel doble con decoración vegetal y leones
Románico
Segunda mitad del siglo XII.
Ubicación original: Claustro
En este capitel se combina la decoración vegetal con la figurada. En la parte inferior se observan hojas de acanto, inspiradas en motivos visibles en el monasterio cercano de San Andrés de Arroyo, donde es característico encontrar bayas que brotan entre las hojas. En la parte superior aparecen seis leones que muerden una de sus patas y se apoyan sobre entrelazados vegetales.
En el arte románico, la figura del león puede tener una connotación positiva o negativa según el contexto en que aparezca. Cuando se representa junto a Sansón o Daniel, simboliza el mal; en cambio, cuando aparece en solitario, se asocia con el bien. El simbolismo más importante que asume es el de Cristo Juez, y su representación más habitual es la que lo muestra como uno de los Tetramorfos, símbolo del evangelista San Marcos.




