Sepulcro de Pedro Díaz de Castañeda
Gótico
Realizado por Antón Pérez de Carrión a finales del siglo XIII
Ubicación:
Nave norte de la iglesia
La iglesia del monasterio sirvió de última morada a numerosos miembros pertenecientes a familias nobles vinculadas con el monasterio de Santa María la Real y a abades relevantes del mismo.
Por esa razón nos encontramos, entre otros, los sepulcros del caballero Pedro y su hermano Nuño. Pedro Díaz de Castañeda fue almirante de Castilla en tiempos del rey Sancho IV de Castilla y su sepulcro, que presenta su imagen yacente, fue tallado, muy probablemente, por Antón Pérez de Carrión, quien también hizo el de Nuño, que descansa al lado de su hermano. El sepulcro de su segunda esposa, Inés Rodríguez de Villalobos, que en su momento también se encontraba en la iglesia del monasterio, actualmente está custodiado en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.
A Pedro se le representa yacente, portando en su brazo los restos de un halcón. Esta representación en un sepulcro resaltaba la predilección del caballero por la cetrería, afición muy extendida en la Edad Media y ligada a la nobleza.
El sepulcro aún conserva restos de policromía lo que nos ayuda a comprender que todo este tipo de piezas, al igual que gran parte de los muros de las iglesias, estaban pintadas.