Menú
10

Capitel de los grifos

Románico

Finales del siglo XII.

Ubicación:

Galería norte del claustro

Compartir

Nos encontramos ante un capitel doble decorado por seis grifos afrontados con cabezas vueltas. Fue una de las pocas cestas que aún permanece en su ubicación original, salvándose tanto del expolio como del traslado de las piezas al Museo Arqueológico Nacional. El grifo es un animal híbrido compuesto por el águila y el león. Es uno de los principales animales que aparecen en los bestiarios en piedra medievales. Estos catálogos de bestias se comienzan a desarrollar en la antigüedad, destacando la obra conocida como el Fisiólogo, un escrito redactado por un autor anónimo entre los siglos segundo y cuarto antes de Cristo. Contiene un conjunto de descripciones de animales, plantas y rocas; la mayor parte de las veces acompañadas por sentencias morales. El libro gozó de una gran notoriedad en el medievo y numerosos autores cristianos lo copian con la idea de reforzar los aspectos morales cristianizados que representaban los animales, que a su vez eran utilizados para el adoctrinamiento de los fieles. Esta fue una de las razones fundamentales por las que gozaron de tanto éxito en el repertorio iconográfico románico.

Otro aspecto interesante se observa en el ala de los grifos, donde apreciamos restos de policromía. Lo que señala como la imagen actual de los edificios románicos, con la piedra descubierta, no era la tónica habitual en la Edad Media, donde gran parte de los muros de los edificios se encalaban, utilizando la policromía en algunos puntos concretos.

Sobre la cesta se dispone un cimacio excepcionalmente decorado por una cestería calada compuesta de tallos vegetales con rosetas en el centro. Destaca el uso del trépano, un instrumento de cantería utilizado desde la Edad Antigua que servía para perforar la piedra, favoreciendo los calados en la roca.

Cronológicamente está fechado a finales del siglo XII. Un momento de ebullición constructiva en el que diferentes maestros están trabajando en la ornamentación del monasterio. El autor de esta pieza destaca por su habilidad en realizar motivos zoomórficos y carnosos trazos vegetales, características que también se observan en otras cestas del claustro y la iglesia, destacando el capitel con la escena de un caballero entre hojarasca y aves, ubicado en el arco que da entrada a la actual Capilla del Cristo. Es el único capitel figurado conservado en la iglesia.

Capitel de los grifosCapitel de los grifosCapitel de los grifos
Inscríbete en nuestro boletín
Inscribirme
Proyecto MUS.netEuropa Creativa
© Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico C.I.F.: G-34147827Sitio diseñado por SGM